jueves, 12 de abril de 2012

VALLE BLANCO

Tras regresar de Chamonix-Zermatt, y como tenemos días libres, no nos podemos marchar sin realizar la bajada del Valle Blanco. Esta bajada consiste en subir al Aguile du Midi, y desde aquí descender esquiando hasta el tren de Montenvers.
Subimos a primera hora y tras esperar la pertinente cola, ya que hay muchisima gente, llegamos a la cima. Desde aquí tenemos unas vistas espectaculares del Mont Blanc.
Tras las fotos de rigor, nos dirigimos hacia la arista, que hay que desdender caminando, con los esquíes en la mochila. Esta arista es muy aérea, pero suelen preparar un camino con cuerdas, para bajar más seguro. Se puede bajar sin crampones, eso sí, agarrándose bien a las cuerdas.
Una vez llegamos al final de la arista, aquí ya nos calzamos los esquíes y comienza la diversión.
La noche anterior había nevado unos 30 cm. y la nieve estaba espectacular. Una nieve polvo muy suelta que dejaba esquiar muy bien. Comenzamos el descenso siguiendo la traza de cerca sin alejarnos demasiado y todo el rato con mucha atención por si pasamos por alguna grieta. Pero esta nieve tan buena, te llama a salir de la traza y coger tramos que estan sin pisar.
El primer tramo es bastante tranquilo con no mucha pendiente, luego cada vez se va empinando más la bajada, para llegar al serac del gigante, en este punto el camino se estrecha y coge pendiente. Esta zona es la más peligrosa y donde más cuidado hay que tener. Después de cruzar el serac de izquierda a derecha, llegamos a la parte final que es el llamado Mar de Glace, ya con muy poca pendiente y nieve un poco más "papa".
Cuando acaba la bajada se llega debajo, a un teleférico que nos sube al tren de Montenvers. Justo aquí suelen excavar una cueva en el glaciar que merece la pena visitar. Tras subir un mogollón de escaleras, llegamos al teleférico y desde aquí al tren para bajar a Chamonix.


Camino del Aguile du Midi.

Vista de la arista que da acceso al Valle Blanco.

 Mont Blanc.

Salida a la arista.

Bajando la arista, con las Grandes Jorases al fondo.
Procesión en la arista.

 Mont Blanck de Tacul.


El monolito que se ve al fondo, Grand Capucin.

Corredor Gervasutti al Mont Blanck de Tacul.
La Tour Ronde a nuestra derecha.
El Diente del Gigante.

Descenso en nieve merengue.
La Tour Ronde.
El Diente del Gigante.

Mirando por dónde bajar.

L´Aguile Verte y le Mar de Glace al fondo.

Glaciares por todas partes.





Más Seracs.

Iker rodeado de Seracs.
El Serac del Gigante. La bajada discurre por la parte derecha del glaciar. Luego en la parte inferior cruzarlo de lado a lado, para llegar a Mar de Glace.

El espectacular Dru.

Al mediodía, llegamos a Chamonix y ya que nos hemos quedado con ganas, decidimos realizar otra vez el mismo descenso. Andamos un poco justos de tiempo, y cada vez hay más nubes, a si que realizamos este segundo descenso parando poco, sin apenas sacar fotos, a ver si vamos a perder el tren.
Otra vez en la arista, esta vez, sin gente.
Hay que darse prisa, que se esta nublando.

Ya en la parte final de  Mar de Glace.
La gruta helada que hay en el final de la bajada.
La Mar de Glace desde el tren de Montenvers.

VAYA PAR DE BAJADAS!!!

Actividad realizada por Iker y Sasa el 5 de abril del 2012.
Con la compañía de Beth, David, Berges, Txebi y Guillen.

martes, 10 de abril de 2012

CHAMONIX-ZERMATT

Tras diez años, vuelvo con mi amigo Iker a esta zona de los Alpes a realizar la travesía reina entre las rutas con esquíes de travesía: La Chamonix-Zermatt.
La vez anterior, realizamos la travesía por la ruta que transcurre por el refugio de Valsorey y pasa cerca del Grand Combin, para llegar a Vignettes por el glaciar de Otemma. Esta vez en cambio, realizamos la variante por Verbier, en un total de cinco etapas.
Tras el pertinente viaje a Chamonix, cómo no, toca ir a la casa de los guías a ver como está la ruta y el parte del tiempo. Los guías nos comentan que tenemos dos días de buen tiempo garantizado y que luego el tiempo se estropeará. Por lo menos el riesgo de avalanchas esta en grado Dos. Decidimos salir el siguiente día y ver venir.

Etapa 1: Argentiere-Ref.Trient
Tras dormir en el parking de Grand Montets situado en el pueblo de Argentiere, preparamos las mochilas y nos dirigimos al funicular que nos subirá a lo alto de la estación de esquí para desde aquí empezar la travesía descendiendo.
El día es esplendido, con todo el cielo azul. Comenzamos el descenso hacia el glaciar de Argentiere. El descenso es evidente. Como es la primera vez que mi compañero Iker está en los Alpes y tenemos cinco días de travesía por delante, nos lo tomamos con tranquilidad. Descendemos hasta el glaciar y aquí ponemos las focas para ganar el primer collado del día, el Col de Chardonnet.
Tras cruzar el glaciar de derecha a izquerda, nos ponenos los crampones para subir una primera pala bastante empinada. Tras  superar ésta, ya con los esquíes puestos, comenzamos a subir el collado. Al principio, con bastante cuesta, para luego suavizarse un poco.
Llegados al collado, toca bajar a la otra vertiente por un corredor bastante empinado. Nosotros aquí nos encontramos una cuerda fija para ayudar a bajar. Hay dos instalaciones de rapel, por si no hay cuerda fija. Pero con esta cuerda y los crampones, se baja bastante bien.
Desde el final del corredor nos ponemos los esquíes y descendemos un poco en dirección a la izquierda, antes de volver a poner las focas para ganar el segundo collado del día, la Fenêtre de Saleina. En este punto no hay que confundirse con el Fenêtre de Tour que es más visible. Nuestro collado queda más a la derecha.
Tras una tranquila foqueada, llegamos al collado que en los últimos metros ganamos con crampones.
En la otra vertiente tenemos el plato de Trient y en el fondo el refugio. Tras un descenso en una buena nieve llegamos bajo el refugio, ponemos focas otra vez y en pocos minutos llegamos al refugio.
 Parking de Grand Montets.
 En lo alto del teléferico, con el Dru en primer plano y el Mont Blanc al fondo.
 Comienza el descenzo al glaciar de Argentiere. En frente nuestro próximo objetivo el Col de Chardonnet.
El santuario de Argentiere a nuestros pies.
Bajando al glaciar, con seracs por todas partes.
Subiendo hacia el Col de Chardonnet, la pala que se ve al fondo, es de donde venimos.
 Bajando el Col de Chardonnet.
 El Col de Chardonnet al fondo camino del siguiente collado.
El Grand Combin al fondo.
La Fenêtre de Saleina.
Descansando, con la cabeza como un "bombo" por la altura.
 Foto desde lo alto de la Fenêtre de Saleina, en dirección por donde venimos. 
Foto en la otra dirección.
El Plateau de Trient desde el refugio. El collado por donde hemos pasado es el situado en la mitad de la foto.


Etapa 2A: Ref.Trient-Champex
Tras pasar la noche en este precioso refugio, desayunamos y nos ponemos en marcha. Por delante nos queda un largo descenso hasta el pueblo de Champex. Cogemos el glaciar de Trient buscando el camino más fácil, esquivando grietas con mucho cuidado.Tras pasar una zona bastante agrietada, llegamos a un pequeño collado, el Col de Ecandies, que da acceso al Valle de Arpette.
Desde aquí un largo descenso hasta Champex.
 Comienzo del descenso.
 El refugio de Trient.
 Buncando el camino en el glaciar.
 Seracs.
 Más seracs.

 El Col de Ecandies.
Un grupo de cinco catalanes con los que luego haríamos "muy buenas migas".
 El Valle de Arpette desde el collado.
Bajando hacia Champex.

En Champex hay que conseguir trasporte hasta Verbier. Una opción es trasporte público en autobús a Orsiéres y luego en tren a Le Châble, pasando por Senbrancher; o alquilar un taxi. Nosotras después de hablar con cinco catalanes que ya habían conseguido un taxi, logramos entrar nosotros dos también y así en muy poco tiempo llegamos hasta Verbier. El taxi nos dejó en un pueblecito que esta antes de Verbier, llamado Le Châble.

Etapa 2B: Le Châble-Ref. Mont Ford
En Le Châble cogemos un teleférico que nos lleva al pueblo de Verbier. Aquí se puede empezar a foquear por pistas hasta el refugio, nosotros seguimos en el teleférico hasta llegar a un lugar llamado Les Ruinettes, que es el punto donde se juntan distintos remontes. Desde aquí, por una pista muy suave llegamos al refugio de Mont Ford, el cual al estar en mitad de las pistas de esquí, está a rebosar de gente. Lo bueno de este refugio es que tiene duchas.
 Le Châble.
 Vista del glaciar de Trient y el Valle de Arpette, de donde venimos.
Camino del refugio.

Etapa 3: Ref. Mont Ford-Ref. Dix
Larga jornada, que debido al mal tiempo tuvimos que variar. En principio el plan era subir el Roseblanche, para desde aquí bajar al refugio de Plafeuri y luego bordeando el lago llegar al refugio de Dix. Pero nada más salir de Mont Ford, las nubes empezaron a tapar cada vez más el cielo, decidimos no subir al Roseblanche y hacer una variante por un collado llamado Sobereu (creo), que queda a la derecha del Roseblanche, desde aquí se baja al embalse de Dix. Una vez aquí, continuamos por la ruta normal hasta el Refugio Dix.
En el Col de Chaux y el Roseblanche al fondo. Lo esquivaríamos por culpa del tiempo por un collado que hay a la derecha.
 El Grand Combin al fondo.

 Detrás, el primer collado, el de Chaux.
 El segundo collado del día.
Detrás queda el collado por donde venimos
El Col de Sobereu.
  Vista del collado hacia el lago de Dix.
 Detrás queda el collado por donde venimos.

 Cruzando el embalse.
 Mont Blanc de Cheilon.
 El embalse de Dix.
 Camino del refugio.
Llegando al refugio de Dix.

Etapa 4: Ref. Dix-Ref. Vignettes
Otra etapa que por culpa del tiempo tuvimos que variar, ya que cuando nos despertamos las nubes tapaban el cielo y había un viento muy fuerte. Nuestra intención era llegar a Vignettes pasando por el pico de Pigne de Arolla, pero visto que esto no era posible decidimos realizar una variante. Bajamos en dirección al pueblo de Arolla, pasando por el Pas de Chevres. Desde aquí descendemos hasta unos remontes mecánicos que vienen desde el pueblo de Arolla. Al llegar a estos, bordeamos el primer glaciar que desciende desde el Pigne de Arolla, para introducirnos en el siguiente valle, que nos llevará directos por el glaciar de Piece hasta el refugio de Vignettes.
Video desde el refugio de Dix.
Refugio de Dix.
 Nubes a primera hora de la mañana.
Tomando el camino hacia Arolla. Nuestro camino tenía que haber seguido por el glaciar de enfrente.
El Pas de Chevres.

Subiendo las escaleras que hay para llegar al collado.
El valle que desciende hacia Arolla, visto desde el collado. Nosotros tenemos que bordear la cresta que se ve en mitad de la foto y coger el valle que se situa detrás.
Final de las escaleras.


Cruzando el glaciar que desciende desde el Pigne de Arolla.
Ladeo peligroso, con nieve en polvo y bastante pendiente.
Ya metidos en el glaciar de Piece, que sube hasta el refugio de Vignettes.
Seracs colgando.
Llegando al refugio.
Nuestra habitación.
El comedor.

Etapa 4: Ref. Vignettes-Arolla.
Nos despertamos y vemos que el tiempo se ha estropeado del todo. No hay apenas visibilidad, ha nevado mucho y hay una fuerte ventisca. Nos preparamos, sin saber qué hacer, vemos que nadie se atreve a abrir huella. Preguntamos a los guías a ver qué pretenden hacer y nos dicen que "para abajo". Nadie va a seguir. Nosotros también decidimos bajar al pueblo de Arolla y volver a Chamonix. Vemos que meterse en ese temporal, con este tiempo para hacer una etapa, que en condiciones normales ya es exigente, con tres collados y un último descenso por glaciares, y que además habría que abrir huella, no lo vemos claro y decidimos abandonar aquí la travesía.
Muy mal tiempo, imposible continuar.
Descenso en nieve polvo. Aunque no lo parezca, ahí hay un esquiador.
Llegando a Arolla.
Nieve polvo.
Fin de nuestra travesía en Arolla.

Hasta aquí hemos llegado, ha sido una pena porque nos quedaba una última etapa espectacular, con un último descenso de 2000 m. de desnivel hasta Zermatt pasando al lado del Cervino. Pero no nos podemos quejar, han sido cuatro días estupendos sin ningún percance grave, que en estos lugares y yendo solo dos amigos, no es poco. Dejamos pendiente para otra ocasión esta etapa. Como se suele decir, "nos vamos, pero volveremos".
Ha sido una travesía espectacular, por los lugares que se atreviesan, glaciares, valles, refugios, descensos, etc...pero sobre todo por la compañía. ¿Eh, Iker?


Para la vuelta a Chamonix cogimos un taxi con los cinco catalanes, que cogimos el otro taxi a Verbier. Hemos hecho muy buenas migas con estos cinco amigos, ya que despues de Verbier coincidimos en todos los refugios y las tardes así fueron muy amenas. Desde aquí les doy las gracias por todo, de parte de Iker y mía. 

Llegamos a Chamonix. Vamos a comer los siete a un bar, luego a un albergue a darnos una ducha y a la noche a cenar para celebrar la travesía. Planeamos el día de mañana, pues tenemos intención de hacer el descenso del Valle Blanco. Esto todavía no ha acabado.

Actividad realizada por Iker y Sasa del 1 al 4 de abril del 2012.
Con la compañía de Beth, David, Berges, Txebi y Guillen.